Boutayeb respondía a dos preguntas centrales en la Cámara de Representantes sobre "el toque de queda nocturno durante el mes de Ramadán".
Conscientes del impacto de la situación sanitaria actual y de sus repercusiones en la seguridad, la salud y la sociedad, las autoridades públicas velan tanto por preservar la salud de los ciudadanos como por proteger el sistema social y económico nacional, afirmó, destacando la estrecha relación entre la consecución de los objetivos sanitarios y los de carácter socioeconómico.
En este sentido, el ministro delegado recordó que la evolución de la situación epidemiológica requiere, en la mayoría de los casos, tomar urgentemente una serie de medidas preventivas, con el fin de proteger la vida de los ciudadanos, y añadió que ante esta delicada elección, "estamos en una situación difícil" en la que la salud prima sobre la economía, lo que provoca "dificultades" económicas cuya recuperación requiere tiempo.
El compromiso colectivo y la movilización para lograr un objetivo común es la única manera de salir de esta delicada fase y volver a la vida normal, insistió.
Gracias a todas estas medidas y disposiciones, el modelo marroquí en materia de gestión de pandemias fue elogiado a nivel nacional e internacional por partes especializadas en la evaluación de la gestión de crisis, concluyó Boutayeb.