"Todas estas piezas arqueológicas, patrimoniales y geológicas, están destinadas en primer lugar a los estudiantes marroquíes, especialmente los del Instituto Nacional de Arqueología y Ciencias del Patrimonio, al mundo académico, a los investigadores y al público en general", subrayó El Ferdaous durante el acto de presentación de esta colección patrimonial repatriada a Marruecos.
El ministro indicó también que actualmente dos proyectos de ley relativos a la Fundación Nacional de Museos (FNM) están en fase de examen en la cámara alta, destinados a reforzar las misiones de esta institución en la creación de nuevos museos y el control de la denominación museo, además de la concesión del sello de museo de Marruecos, así como a sensibilizar a los jóvenes sobre la riqueza del patrimonio arqueológico marroquí.
Por su parte, la embajadora de Francia en Rabat, Hélène Le Gal, destacó que estos miles de reliquias de los tiempos más remotos volvieron por fin a su territorio, de acuerdo con los compromisos de Francia y Marruecos en el marco de la Convención de Ginebra de la UNESCO de 1970.
"Esta importante devolución atestigua, en primer lugar, la voluntad conjunta de las autoridades francesas y marroquíes de luchar contra el tráfico ilícito de bienes culturales, una lacra que priva a los pueblos de un patrimonio al que todos deberían tener acceso", subrayó la diplomática gala.
Por su parte, Choumicha Kaouane, jefa del Servicio de Exposiciones Temporales de la Dirección de Patrimonio Cultural del Departamento de Cultura, presentó la colección devuelta, compuesta por 25.234 piezas de un peso total de casi tres toneladas.
Esta colección, muy diversificada, se dividió en cuatro categorías en forma de patrimonio geológico (minerales, flora, fauna fósil, trilobites, amonites fechados en el periodo cretácico de -145 a -66 millones de años, cráneos de cocodrilos y tortugas y miles de dientes de peces), explicó.
La segunda categoría se compone de objetos arqueológicos que incluyen herramientas prehistóricas del Paleolítico (el primer periodo de actividades humanas en Marruecos, fechado hace unos 1,2 millones de años), y del Neolítico (a partir del 7º milenio a.C., como bifaces, cuchillas, puntas de flecha y grabados rupestres), mientras que la tercera categoría incluye una colección etnográfica que incluye principalmente vasijas de cerámica y piedras de molino, añadió Kaouane.
La cuarta categoría incluye artesanías hechas con fósiles geológicos, como amonites y ortóceras (-470 y -252 millones de años), entre otros, concluyó la responsable marroquí.