A este respecto, el director de la Oficina Central de Investigación Judicial (BCIJ), Habboub Cherkaoui, dijo que la estrategia nacional adoptada por el Reino desde los acontecimientos de 2003, le confiere una posición de vanguardia a nivel regional e internacional en este ámbito, señalando que esta política ha tenido resultados positivos como lo demuestran los logros de la BCIJ que logró desmantelar una serie de células terroristas y cortar de raíz sus proyectos terroristas en el Reino.
Marruecos, explicó, ha adoptado medidas eficaces a todos los niveles, incluidos los aspectos jurídico y de seguridad, la reestructuración del ámbito religioso, la dimensión socioeconómica y la cooperación internacional, de acuerdo con las normas vigentes y respetando plenamente la ley y los derechos humanos, en aplicación de las Altas Orientaciones de Su Majestad el Rey Mohammed VI.
También recordó la contribución de la BCIJ a los esfuerzos para combatir la delincuencia terrorista a nivel internacional y regional.
Por su parte, el director de la Dirección de Asuntos Penales e Indultos en el Ministerio de Justicia, Hicham Mellati, destacó que el Reino ha puesto en marcha una política penal que complementa la política de seguridad en un marco preventivo a través del refuerzo del arsenal jurídico, y ha consolidado su cooperación internacional a través de la firma de acuerdos bilaterales en materia de extremismo violento y terrorismo, habiendo alcanzado hasta la fecha, 80 convenios en materia penal a favor de una cooperación securitaria y judicial para hacer frente al fenómeno.
Mellati consideró que el enfoque securitario y restrictivo es insuficiente y que la lucha contra las ideas que alimentan el extremismo y el terrorismo requiere la convergencia de las políticas securitaria y penal con las políticas públicas preventivas y proactivas para erradicar los motivos que conducen a este tipo de extremismo, ya sean directos o atractivos, llamando a la elaboración de un plan de acción nacional en el que confluyan diversas políticas para desarrollar una visión global con vistas a combatir esta lacra.
El director de la Dirección de Asuntos Penales e Indultos destacó además una serie de incentivos en consonancia con algunas iniciativas de otros sectores, el más importante de los cuales es el programa "Moussalaha", señalando que desde 2005 se ha indultado a 643 detenidos relacionados con casos de terrorismo, sin que se haya registrado ningún caso de reincidencia.
Por su parte, el secretario general de la Delegación General para la Administración Penitenciaria y la Reinserción (DGAPR), Younes Jebrane, subrayó que la estrategia general del Reino en este ámbito, basada en la anticipación, la inmunización religiosa y la lucha contra la precariedad, ha logrado gestionar este dosier, gracias a la estrecha coordinación entre todas las instancias, lo que le ha permitido gozar de un amplio reconocimiento internacional, señalando que la gestión de la DGAPR del caso de los detenidos condenados por terrorismo y extremismo violento se basa en un enfoque multidimensional, que abarca la seguridad, la integración y la cualificación del personal penitenciario.
Jebrane también informó sobre una serie de programas destinados a la cualificación de los reclusos, entre ellos el programa "Moussalaha", junto con otros programas destinados a reforzar los valores de tolerancia y moderación, dirigidos a todas las categorías de reclusos, entre ellos uno destinado a inculcar los principios de tolerancia a todos los reclusos, un programa de lucha contra el extremismo mediante la retirada de las bibliotecas de las prisiones de todos los libros que incitan a la violencia y al extremismo y su sustitución por otras referencias que incitan a la tolerancia.
En el marco de la contribución de la Rabita Mohammadia de los Ulemas a los esfuerzos para combatir las tendencias del terrorismo y del extremismo violento, el presidente del Centro de Estudios e Investigación en los Valores, dependiente de esta institución, Mohamed Belkbir, dijo que la Rabita no se limita al enfoque de la seguridad a través del método de la confrontación intelectual.
Hay dos polos principales en el fenómeno del terrorismo y el extremismo violento, precisó, el polo de los teóricos y el de los actores sobre el terreno, que son el motor del extremismo y el terrorismo entre los jóvenes y las mujeres.
La Rabita quiere proteger e inmunizar a estas categorías convenciéndolas de que rechacen el extremismo para debilitar a los teóricos y ha adoptado por ello herramientas y métodos para desmontar el discurso religioso, sus mecanismos y su aparato conceptual, a través de 20 folletos para desarrollar la inmunidad de los jóvenes contra el extremismo, dijo.
La conferencia, organizada por el Observatorio Marroquí sobre el Extremismo y la Violencia (OMEV) en colaboración con la Delegación General para la Administración Penitenciaria y la Reintegración, el Policy Center for the New South y la Rabita Mohammadia de los Ulemas, dura tres días, con la participación de expertos y profesionales especializados en cuestiones relacionadas con el terrorismo y el extremismo violento procedentes de diferentes países, así como de instituciones regionales e internacionales, en particular la Dirección Ejecutiva de la Lucha contra el Terrorismo de las Naciones Unidas.
Debido al actual estado de emergencia sanitaria, la conferencia se celebra de forma presencial, garantizando al mismo tiempo las condiciones de prevención y seguridad de los participantes, y por videoconferencia.