El Alto Comité destacó, en un comunicado, que la elección de Guterres y de la activista Ibn Zyaten por parte del jurado se produce como recompensa a "las grandes obras realizadas y a las influyentes y eficaces iniciativas que han tomado y que están en consonancia con los valores y principios estipulados en el Documento sobre la Fraternidad Humana, que es el principal criterio para la atribución" del Premio.
"Desde que asumió el cargo de Secretario General de la ONU en 2017, Guterres ha trabajado para encontrar soluciones a los problemas que afligen al mundo, en particular en lo que respecta a la paz y la seguridad mundiales", recuerda el comunicado que resalta la iniciativa más importante e influyente tomada por el SG de la ONU en el último año bajo el signo: "Prohibir las guerras para luchar contra la pandemia Corona", que fue ampliamente saludada por los dirigentes del mundo y varias organizaciones internacionales.
El Alto Comité señaló que Ibn Zyaten, una de las "figuras más activas e influyentes en el ámbito de la lucha contra el extremismo, ha dedicado su vida a la sensibilización sobre la intolerancia religiosa, tras la pérdida de su hijo Imad en un ataque terrorista en 2012. Desde entonces, Latifa se ha convertido en una activista de los derechos cívicos. Conocida en Francia y en el extranjero, trabaja con las familias y las comunidades para evitar que los jóvenes caigan en la trampa del extremismo, y obra por difundir la paz y la cultura del diálogo y el respeto mutuo.
El Alto Comité para la Fraternidad Humana celebrará una ceremonia en honor de los galardonados, el jueves por la noche en Abu Dabi, que se retransmitirá en directo por Internet en la página web del premio.