"La política exterior de un gobierno es definida por su presidente y su ministro de relaciones exteriores. Esto debe quedar muy claro. Cualquier otro miembro del gobierno en otra posición puede tener una opinión personal", subrayó, el jueves, Robles en declaraciones a la prensa.
La posición oficial de España sobre el tema del Sahara es "expresada por el presidente del gobierno y el ministro de asuntos exteriores", aclaró.
"Cualquier miembro del gobierno puede tener sus opiniones personales, pero el gobierno es un órgano colegiado y debe estar al frente de las posiciones tomadas", insistió la responsable española.
La misma posición fue expresada por la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, quien señaló que "la posición del gobierno español respecto al Sahara es muy clara y no ha cambiado en las últimos horas, días o semanas".
Esta posición consiste en "apoyar plenamente" al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, para que pueda "garantizar el mantenimiento del alto el fuego" en el Sáhara y avanzar "en una negociación política que permita una solución política, negociada, justa y duradera, de acuerdo con las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad de la ONU", señaló González Laya en declaraciones a la prensa al final del Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de la UE.