En una entrevista telefónica, el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, y el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación y Mauritanos del Extranjero, Ismail Ould Cheikh Ahmed, "evocaron la gravedad de la situación existente y expresaron su temor de que se exaspere más y degenere en violencia de consecuencias desastrosas".
Según la agencia de noticias mauritana "AMI", Guterres llamó Mauritania a desempeñar un "papel positivo y reconocido por todas las partes para aliviar la situación".
El jefe de la ONU también destacó los contactos que realizó en los últimos dos días y expresó su preocupación por la "gravedad de la situación sobre el terreno".
Por su parte, el ministro mauritano recordó el papel pionero que todo el mundo espera que la ONU desempeñe para resolver la crisis lo antes posible.
También afirmó al Secretario General de las Naciones Unidas que Mauritania lleva a cabo sus buenos oficios desde hace días, y de manera intensa.
Por otra parte, en una breve declaración al final de un consejo de ministros, el portavoz del Gobierno mauritano destacó que la diplomacia mauritana está trabajando actualmente para "encontrar, lo antes posible, una solución a la crisis que prevalece en el paso fronterizo de El Guerguerat".
El mismo añadió que "no somos parte en este litigio, pero estamos concernidos, como vecinos de las diferentes partes, por esta crisis" en las fronteras del norte de Mauritania y que perturba el suministro de sus mercados, que dependen en gran medida de las importaciones de Marruecos.