En su resolución 2548, el órgano ejecutivo de las Naciones Unidas saludó el nuevo impulso creado por las dos mesas redondas sobre la cuestión del Sáhara, celebradas en diciembre de 2018 y marzo de 2019 en Ginebra por iniciativa del ex Enviado Personal del Secretario General de las Naciones Unidas, Horst Köhler, a la vez que se congratuló del "compromiso" de Marruecos con inscribirse en el proceso político de las Naciones Unidas de una "manera seria y respetuosa".
Llamando al nombramiento de un nuevo Enviado Personal del Secretario General de las Naciones Unidas para el Sáhara, el Consejo de Seguridad alienta, a este respecto, la reanudación de las consultas entre el próximo Enviado Personal y las partes en este diferendo regional, a saber, Marruecos, Argelia, Mauritania y el polisario.
Así pues, el Consejo expresó su "pleno apoyo" a los esfuerzos en curso del Secretario General y su próximo Enviado Personal encaminadas a mantener el renovado proceso de negociaciones a fin de llegar a una solución de la cuestión del Sáhara.
El Consejo también llamó al próximo Enviado Personal a aprovechar los progresos realizados por su predecesor en el marco del proceso de las mesas redondas y, por lo tanto, comenzar donde Horst Köhler había llegado.
Asimismo, el Consejo de Seguridad saludó "el compromiso" de Marruecos, Argelia, Mauritania y el polisario con seguir comprometidos durante todo este proceso con un espíritu de realismo y compromiso a fin de asegurar su éxito.