"Gracias a las orientaciones visionarias y vanguardistas de SM el Rey Mohammed VI, Marruecos adoptó un enfoque pionero e innovador que le permitió adaptarse rápidamente al contexto vinculado a la pandemia de la Covid-19 y hacer frente a una situación excepcional que vive hoy toda la humanidad", subrayó El Otmani en esta Cumbre virtual destinada a repensar la educación en el mundo actual y en el del post-Covid-19.
Marruecos logró adoptar medidas eficaces para proteger el sistema educativo y garantizar la continuidad de la enseñanza, preservando al mismo tiempo la salud y la seguridad de los profesores y los alumnos, agregó.
«El año pasado logramos organizar el examen nacional de bachillerato y también establecimos un plan de acción para organizar el año escolar actual 2020-2021. Hemos garantizado el comienzo del año escolar a tiempo y de forma continua sin interrupciones», explicó el jefe del Gobierno.
Todo esto fue posible gracias a la movilización de los esfuerzos de todos los ejecutivos, profesores, estudiantes y alumnos, así como de las familias, se congratuló El Otmani.
El mismo subrayó que en Marruecos «consideramos que la pandemia, aunque sea grave, presenta también una oportunidad que debemos aprovechar». Así, se aprobó una ley marco para garantizar una educación de calidad para todos, en particular los más vulnerables y, sobre todo, las niñas de las zonas rurales.
Asimismo, El Otmani afirmó que Marruecos está aumentando el presupuesto de la educación sobre una base anual de 8 PC.
Valorando las conclusiones alcanzadas por los distintos grupos de trabajo de la UNESCO, el jefe de Gobierno subrayó que la consecución eficaz de los objetivos previstos en relación con estas conclusiones sigue dependiendo de la coordinación de los esfuerzos de la comunidad internacional.
Para la realización óptima de los ODS, en particular la ODS4 (Garantizar el acceso de todos a una educación de calidad, en pie de igualdad, y promover las posibilidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida), «hay que adaptar las medidas para que sean adecuadas a las realidades de cada país», insistió El Otmani.
«También es necesario mejorar el mecanismo de cooperación internacional y la calidad de la educación para que esté al servicio de los más vulnerables y, en particular, de las niñas de las zonas rurales», sostuvo.
Organizada en colaboración con los gobiernos de Ghana, Noruega y el Reino Unido, la Cumbre Mundial sobre la Educación de la UNESCO constituye una plataforma de intercambio entre dirigentes políticos de alto nivel, ministros, responsables políticos, organizaciones multilaterales, socios para el desarrollo y actores mundiales de la educación para proteger y repensar la educación en el mundo actual y el del post-Covid-19.