En un comunicado remitido a la MAP, la familia de la Resistencia y los miembros del Ejército de Liberación expresaron "su firme condena y su total rechazo" a los gestos de los separatistas destinados a obstruir el tráfico civil y comercial regular en el paso fronterizo de El Guergarat.
Estas peligrosas maniobras llevadas a cabo por el "polisario", "por orden del régimen militar argelino" en esta zona tampón, constituyen un "punto de inflexión crítico" que amenaza la estabilidad y la seguridad de la región.
Se trata también "de una flagrante violación" de los acuerdos militares y del alto el fuego, y "un desprecio por la voluntad de las Naciones Unidas y las resoluciones del Consejo de Seguridad relativas al conflicto regional artificial en torno al Sáhara marroquí", según el comunicado.
La misma fuente insiste en la necesidad de abstenerse de cualquier acción que pueda "socavar nuestra integridad territorial y alterar el statu quo en esta zona tampón", señalando que estas provocaciones pondrían en peligro el proceso de las Naciones Unidas para resolver la cuestión del Sáhara marroquí.
Además, la familia de la resistencia y los antiguos resistentes del Ejército de Liberación expresaron su "permanente disposición" a hacer frente a todos los desesperados intentos del "polisario" y sus partidarios de socavar la seguridad, la estabilidad y la integridad territorial de Marruecos, e hicieron un llamamiento a la Comunidad Internacional para que "asuma su plena responsabilidad ante esta peligrosa escalada y estas provocaciones".
Por otra parte, el comunicado saluda las medidas históricas y de la sabia política adoptada por SM el Rey Mohammed VI para defender la integridad territorial del Reino, subrayando que el plan de autonomía presentado por Marruecos sigue siendo la única solución para poner fin a este conflicto artificial.
La familia de la Resistencia y los miembros del Ejército de Liberación en Assa-Zag también reitera su inquebrantable apego al glorioso trono alauí y su movilización detrás de SM el Rey Mohammed VI en defensa de las constantes sagradas del Reino.