"Esta pandemia ha dejado en evidencia tres grandes crisis interconectadas a las que se han enfrentado nuestras sociedades desde principios de siglo: la degradación ambiental incontrolada; la profundización de las desigualdades económicas y sociales y el aumento de la pobreza; y los desequilibrios institucionales frente a la pandemia, ya que la cooperación internacional ha carecido de eficacia y coherencia", subrayó el jefe de Gobierno, Saad Dine El Otmani, en un discurso pregrabado transmitido ante los representantes de los Estados miembros de la ONU durante el debate de alto nivel en la sala de la Asamblea General.
"Las peligrosas manifestaciones de estas crisis, y la necesidad de encontrarles soluciones urgentes, no fueron provocadas por la epidemia del Covid-19, sino que ensombrecieron nuestras sociedades desde el comienzo del tercer milenio", estimó.
El Otmani agregó que "esta constatación ha impulsado al Reino de Marruecos, bajo la dirección de Su Majestad el Rey Mohammed VI, a integrar esta visión en la concepción de un nuevo modelo de desarrollo integrado", recordando que el Soberano había hecho, desde la cumbre sobre el desarrollo sostenible de 2002, un llamamiento a una renovada solidaridad mundial, preguntándose si "los diferentes trastornos y las violentas crisis que ha experimentado el mundo no constituyen argumentos potentes para convencer a los más escépticos de que el logro de un desarrollo sostenible es asunto de todos y una responsabilidad compartida".
A nueve años del vencimiento del plazo para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible, el compromiso de la comunidad internacional sigue siendo más decisivo que nunca en el contexto de la pandemia, en el sentido de que concierne ante todo a las categorías más vulnerables y desfavorecidas, particularmente en África, prosiguió el jefe de Gobierno.
El Otmani señaló que la respuesta de Marruecos a la pandemia fue guiada por la visión clarividente de Su Majestad el Rey Mohammed VI, basada en la anticipación, la prevención y la primacía de la salud de los ciudadanos, permitiendo así la movilización de todas las instituciones y componentes de la sociedad para hacer frente a la emergencia sanitaria.