"Los importantes progresos realizados por la OMPI en el último decenio no deben eclipsar la necesidad de trabajar más para satisfacer las necesidades de los Estados miembros, en particular los países en desarrollo, y para hacer frente a los múltiples desafíos a los que nos enfrentamos hoy en día", afirmó el representante permanente adjunto de la Misión del Reino en Ginebra, Abdellah Boutadghart, en una declaración en nombre de Marruecos.
A este respecto, continuó, "la aplicación efectiva de las recomendaciones del Plan de Acción de la OMPI para el Desarrollo permitirá sin duda a los países en desarrollo aprovechar mejor los diversos beneficios que ofrece el sistema internacional de propiedad intelectual".
Los profundos cambios que afectan al mundo exigen que la OMPI reconsidere el marco de la propiedad intelectual, analizando los aspectos jurídicos, políticos y éticos de las repercusiones de la inteligencia artificial en la creatividad y la innovación, añadió el diplomático marroquí.
Además, debía prestarse especial atención al programa normativo con miras a completar las prolongadas negociaciones sobre, entre otras cosas, la protección de los recursos genéticos, los conocimientos tradicionales y las expresiones culturales tradicionales, las emisoras de radio contra la piratería de señales, así como las negociaciones sobre la cuestión de la convocación de una conferencia diplomática para la adopción del Tratado sobre el Derecho del Diseño (DLT), sostuvo Boutadghart.
El diplomático marroquí subrayó el compromiso de Marruecos con el multilateralismo como "un elemento esencial en el mundo actual, más complejo e interdependiente", y señaló que "es esencial que cada uno de nosotros muestre flexibilidad y modere sus reivindicaciones en aras del interés común".