La UE puede aprovechar la experiencia entre España y Marruecos para crear "canales de inmigración legal y salarios decentes", señaló el jefe de la diplomacia maltesa en una rueda de prensa tras las conversaciones con su homóloga española, Arancha González Laya.
En este contexto, Bartolo pidió el apoyo europeo a los países de tránsito como Marruecos, señalando que la reforma de la política migratoria preparada por la UE no sólo debería centrarse en la distribución de los migrantes que llegan al territorio europeo, sino que también debería "abordar la raíz del problema".
"No podemos seguir quitando recursos y jóvenes a África y esperar que los países africanos tengan los recursos para salir adelante", advirtió.
Además, señaló que la pandemia de la Covid-19 empeorará la situación en África, empujando a hasta 27 millones de personas a la pobreza extrema y creando más presión migratoria hacia Europa.
Por su parte, la ministra española subrayó la necesidad de la "solidaridad" europea en la gestión del fenómeno migratorio, argumentando que para el gobierno progresista de su país "la solidaridad es un concepto básico en la política migratoria".
Como puerta de entrada a Europa, España quiere que toda la UE "se preocupe por una respuesta común" a esta cuestión, dijo.