En este mensaje, SM el Rey expresa en esta "dolorosa prueba, que se enmarca en el destino imparable de Dios", a Cheikh Mouhamadou Mahi Niass y, a través de él, a toda su familia y allegados, así como a todos los adeptos de la hermandad tidjane en Senegal, país hermano, sus profundas condolencias y sus sinceros sentimientos de compasión tras el fallecimiento de "esta eminente personalidad sufí que dedicó su vida al servicio del Islam y a la difusión de sus nobles enseñanzas, no sólo en su país sino también en África Occidental".
"Compartimos sus sentimientos tras esta cruel pérdida, implorando al Todopoderoso que le conceda paciencia y consuelo", subraya SM el Rey, recordando los sentimientos de estima, amor y lealtad que el difunto guardaba por el Soberano y los fuertes lazos espirituales y místicos que el difunto mantenía con su segundo país, Marruecos, así como su gran determinación a contribuir al fortalecimiento de los distinguidos lazos fraternales y religiosos que unen a los pueblos marroquí y senegalés.
SM el Rey ruega también al Altísimo que acoja al difunto en su misericordia, que le recompense generosamente por sus nobles actos y le acoja en su vasto Paraíso entre los Profetas, los virtuosos y los mártires, y que preserve a Cheikh Mouhamadou Mahi Niass y le conceda salud, bienestar y larga vida, así como éxito en la búsqueda del resplandor del mensaje espiritual de la hermandad tidjane, basada en la Sunna del Profeta, siguiendo los pasos de sus predecesores.