Marruecos se ha esforzado por diversificar las fuentes de crecimiento mediante el desarrollo de la industria del automóvil, poniendo en marcha desde 2012 la planta de Renault en Tánger, reza este informe publicado por los órganos de las Naciones Unidas que operan en la región, especialmente la Comisión Económica y Social para Asia Occidental (CESPAO).
Por consiguiente, continúa el documento titulado "Prosperidad de los países y desarrollo humano", la industria del automóvil del Reino ha crecido un 20% al año y es ahora un elemento motor del crecimiento de las exportaciones marroquíes, considerando que el inicio de la producción en la planta de Peugeot-Citroën en Kenitra es capaz de consolidar los esfuerzos del Reino en el sector de la industria automovilística.
En el informe se señala que el modelo marroquí muestra el potencial desaprovechado por los países árabes para integrarse en la economía mundial, y se hace un llamamiento a los países árabes para que mejoren el clima de negocios, ofrezcan oportunidades a los jóvenes, creen un entorno propicio para el desarrollo de nuevos sectores y refuercen la integración de los países en las cadenas de valor mundiales.