En un análisis sobre la cuestión del Sáhara marroquí y la paz en la región, el académico Napoleón Campos subrayó que "el régimen argelino no es un interlocutor válido o legítimo" para lograr una solución a este conflicto. Porque, señaló, en Argelia "sólo un nuevo gobierno democrático y respetuoso de los compromisos y tratados internacionales puede ser un actor indispensable en las negociaciones".

Para el investigador salvadoreño, "al igual que la decadencia moral y política de las antiguas guerrillas de América Central (...), ha llegado el momento de la decadencia del frente polisario de Tinduf, Argelia, que está experimentando una desestabilización debido a la corrupción que reina allí como amo absoluto, la falta de democracia en los campamentos y la sumisión al poder en Argelia".

El especialista en asuntos internacionales declaró además que ninguna resolución del Consejo de Seguridad o de la Asamblea General de las Naciones Unidas reconoce al frente polisario como entidad representativa, mientras que la legitimidad de los funcionarios elegidos localmente ya no está en duda, señalando que los separatistas y su pseudo "RASD" no tienen ninguna legitimidad.

Destacando la pertinencia de la propuesta marroquí de autonomía para el arreglo de este conflicto artificial, Campos recordó que este plan se inscribe en el marco de un proceso de democratización, reconciliación y apertura política, económica y cultural al mundo, en el que Marruecos participa desde hace años.

Refiriéndose a las relaciones entre el Reino y los países de América Central, el experto salvadoreño señaló el establecimiento del Foro Marruecos-SICA (Sistema de Integración Centroamericana), que tenía por objeto ser un instrumento jurídico fundamental para fortalecer los vínculos entre el Reino y los países de América Central en las esferas económica, técnica, científica, educativa y cultural, entre otras, y para promover un modelo de cooperación Sur-Sur.

"Marruecos, que constituye un verdadero vínculo entre África y Europa, representa para los países centroamericanos un trampolín para acceder al mercado europeo y a las oportunidades que ofrece su acuerdo de asociación con la Unión Europea", dijo, estimando que el Reino, gracias a su liderazgo en la región en diversos ámbitos, puede contribuir a la elaboración de un tratado de libre comercio con los países centroamericanos en el marco de una asociación Sur-Sur.