Es Argelia, animada por diseños de hegemonía regional, que creó el polisario, que continúa brindándole apoyo político, militar y financiero, y que continúa a movilizar todo su aparato diplomático a favor de las tesis separatistas, indicó el especialista en conflictos en el análisis que realizó en el «Sahara Debate», un programa ciudadano que se transmite dos veces por semana en las redes sociales.
Para este profesor universitario, Argelia está, hoy, aislada en la escena internacional en su apoyo al polisario y sus tesis gastadas.
Al continuar discutiendo con opciones obsoletas y desgastadas, Argelia es responsable de la persistencia de este diferendo regional y contribuye a la inestabilidad de la región, dijo el profesor, recordando a este respecto que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y con él toda la comunidad internacional ha abandonado desde 2001 la opción de referéndum, y ahora exhorta a las partes a trabajar para alcanzar una solución política realista y pragmática, sostenible y basado en el compromiso.
Argelia esconde sus inclinaciones geopolíticas detrás de una concepción engañosa del principio de autodeterminación, ha sostenido el investigador universitario, quien agregó de paso que la autodeterminación nunca ha sido sinónimo de referéndum para las Naciones Unidas.
El experto comparó así la Iniciativa marroquí de Autonomía que satisface el principio de autodeterminación con sus promesas de reconciliación, seguridad, desarrollo y buen gobierno, con la opción destructiva del referéndum defendido por Argelia y el polisario que, además de ser poco realista, solo puede sembrar división y inestabilidad en la región.
Gain también cuestionó las intenciones reales del gobierno argelino, que se está posicionando como «defensor de los derechos de los pueblos» en este diferendo regional en un momento en que la movilización de los argelinos por la democracia y la justicia social no dio signos de declive por más de un año.
El académico también se preguntó sobre el crédito para dar a los reclamos del polisario a la representatividad, cuando «este grupo viola los derechos de la población de los campamentos de Tinduf, desvía la ayuda humanitaria, utiliza herramientas indecentes para perpetuar su control sobre los campamentos y no dejan lugar para cuestionar sus elecciones».
Como prueba del vacío de las reclamaciones del «polisario» a la representatividad, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea rechazó el recurso presentado por este grupo armado contra la renovación de los Acuerdos Agrícolas y Pesqueros Marruecos-UE por «falta de calidad para actuar».
Para el Sr. Gain, los únicos representantes legítimos de las poblaciones del Sahara marroquí son los representantes electos locales, a través de los cuales participan en la formulación y implementación de políticas de desarrollo ambiciosas, innovadoras y participativas en el marco del Nuevo Modelo de Desarrollo de las Provincias del Sur lanzado por Su Majestad el Rey en 2015.
Cabe recordar que el Comité de las Naciones Unidas de los Veinticuatro invitó a dos representantes locales elegidos del Sahara marroquí, el Sr. Mhammed Abba y la Sra. Ghalla Bahiya, como representantes de la población de la región a los trabajos del Seminario Regional del Comité celebrado en Granada en mayo de 2019 y en su sesión de recaudación de fondos celebrada en Nueva York en junio de 2019.
El Sr. Gain enfatizó que las poblaciones de los campamentos de Tinduf no se dejan engañar por la dinámica real del diferendo regional, como lo demuestra la ola de protestas que actualmente cruza los campos.
Conscientes de la naturaleza mercenaria del «polisario», las poblaciones de los campamentos de Tinduf impugnan activamente el reclamo de representatividad de este grupo armado en el pago de los generales argelinos, como lo demuestra la reciente creación de movimientos e iniciativas dirigidas explícitamente contra esta milicia.
En su búsqueda de libertad, las poblaciones de los campamentos de Tinduf se enfrentan a la feroz represión del «polisario». En esta área sin ley, cuyo acceso y salidas están prohibidos tanto por el cordón de seguridad del ejército argelino como por el del «polisario», las poblaciones son amenazadas diariamente con «detención arbitraria, desaparición forzada, de tortura y ejecución extrajudicial con la complicidad activa de Argelia, lamenta el profesor universitario.
Según el investigador universitario, esta situación fue posible gracias a la delegación de Argelia de la autoridad sobre los campamentos de Tinduf al «polisario» en violación del Derecho Internacional Humanitario, en particular la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951, que establece que el Estado anfitrión tiene la obligación de proteger a las poblaciones de su territorio.
Cabe recordar que, a falta de una reserva sobre la aplicación territorial de la Convención, Argelia tiene prohibido transferir su soberanía a una entidad no estatal, además de militar, en su territorio.
El Sr. Gain recordó a este respecto que el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas expresó en sus observaciones finales sobre el cuarto informe periódico de Argelia que aprobó en su 123a sesión en 2018 «sus preocupaciones en cuanto a la devolución de facto por parte de Argelia de sus poderes, especialmente jurisdiccionales en el polisario».
El presidente del Instituto Africano para la Consolidación de la Paz y la Transformación de Conflictos realizó este análisis como parte del «Sahara Debate», un programa ciudadano que pretende ser una plataforma abierta y democrática para proporcionar ideas serenas y apasionadas sobre la cuestión del Sahara marroquí.