En una pregunta al Alto Representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, la eurodiputada afirmó que la situación de los derechos humanos en Argelia es muy preocupante.
Recordó que el Parlamento Europeo había aprobado, el año pasado, una resolución sobre la situación de las libertades en Argelia, en la que se pedía a la Comisión Europea y al Servicio de Acción Exterior apoyar a la sociedad civil, los periodistas y los activistas de ese país del Magreb y seguir de cerca la preocupante evolución de la situación de los derechos humanos en el contexto de las manifestaciones pacíficas del hirak, pero no se había producido ningún cambio. Con las medidas de confinamiento vinculadas a la propagación del virus en este país, el más afectado de África, la situación se ha deteriorado, deploró la diputada.
Ante esta situación tan preocupante, la eurodiputada española preguntó a Borrell acerca de los mecanismos e instrumentos que la Unión Europea puede utilizar para imponer el respeto de las disposiciones de la resolución del Parlamento Europeo sobre Argelia.
Rodríguez Ramos también preguntó cómo supervisa la UE la situación de los derechos humanos y las libertades en Argelia en el contexto de la pandemia del COVID-19 y cuál es su evaluación de las repercusiones de la crisis sanitaria en la situación política y social de ese país.
No es la primera vez que el Parlamento Europeo se interesa por la situación de los derechos humanos en Argelia y pide que la Unión Europea adopte medidas para garantizar el respeto de las libertades pisoteadas por el régimen.
Muchos eurodiputados preguntan al Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad sobre este tema. Se aprobó una resolución del Parlamento Europeo en noviembre de 2019 que condena las violaciones masivas de los derechos humanos, la violencia contra activistas y manifestantes, los casos probados de tortura y la política de persecución religiosa que ha dado lugar al cierre de iglesias.
La misma resolución llamó las autoridades argelinas a poner fin a todas las formas de intimidación, incluido el acoso judicial y legislativo, la criminalización, el arresto y la detención arbitrarios de manifestantes pacíficos, defensores de los derechos humanos, periodistas críticos y autores de blogs, y a tomar las medidas necesarias para garantizar su protección física y psicológica, su seguridad y su libertad para llevar a cabo sus actividades legítimas y pacíficas.
En el contexto de la nueva pandemia de coronavirus, esta situación no ha hecho más que empeorar y muchos diputados se han puesto manos a la obra para pedir medidas urgentes que garanticen el respeto de los derechos humanos y la liberación de los activistas y periodistas encarcelados.
El 26 de marzo, el Subcomité de Derechos Humanos y la Delegación del Parlamento Europeo encargada de las relaciones con los países del Magreb emitieron una declaración conjunta en la que se denunciaba el "acoso judicial" contra El activista argelino de derechos humanos Karim Tabbou, particularmente en el contexto de la pandemia de coronavirus.
Unos días más tarde, y en vista del carácter urgente y sumamente humanitario de este caso, los presidentes de los dos órganos del Parlamento Europeo preguntaron al Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior sobre una cuestión prioritaria, pidiendo tomar medidas inmediatas para liberar a este dirigente y a todos los prisioneros de conciencia en Argelia.