"Es necesario revisar el papel del Estado en la lucha contra la pobreza para que pase de la regulación de los servicios básicos a su promoción y protección", señaló Bouayach en una declaración a la MAP.
Insistió en la necesidad de ocuparse después del desconfinamiento del tratamiento del problema de la pobreza en su conjunto y no sólo de la situación de las categorías afectadas por este fenómeno.
Bouayach indicó que el CNDH había recibido un gran número de quejas relativas a las solicitudes de subsidios concedidos durante el período de confinamiento, en las que se pedía que se estableciera una estrategia global de lucha contra la pobreza.
En cuanto a la labor del CNDH durante este período excepcional, Bouayach declaró que el Consejo había abordado todas las cuestiones de derechos humanos durante este período de confinamiento, citando, entre otras cosas, las cuestiones relacionadas con las categorías vulnerables, incluidos los niños, las personas con discapacidad, los migrantes, las personas desplazadas y las mujeres.
Por otro lado, el mecanismo nacional de prevención de la tortura ha visitado los centros de protección de la infancia para informarse sobre las medidas preventivas contra esta pandemia, dijo.
Por otra parte, Bouayach señaló la restricción de ciertos derechos y libertades durante el período de confinamiento, como en otros países, y pidió que se preservaran los logros de Marruecos en materia de Derechos Humanos.