Expresándose por videoconferencia durante esta reunión dedicada al examen de los medios para contrarrestar la pandemia, Bourita recordó el clarividente e ilustrado llamamiento que hizo Su Majestad el Rey durante la 14ª Cumbre del Movimiento en 2006.
"Necesitamos establecer mecanismos de reflexión, propuesta y consulta para dominar lo que está en juego y hacer frente a los desafíos que nos plantean las guerras, los conflictos internos, la pobreza, las pandemias y las amenazas terroristas", dijo Bourita, señalando que el llamamiento de Su Majestad el Rey dirigido al segundo grupo de Estados más grande después de las Naciones Unidas, nunca ha resonado con tanta fuerza como en el contexto actual.
Asimismo, Bourita también presentó un análisis de tres puntos sobre las consecuencias de la pandemia:
Primero, esta crisis sanitaria durará un tiempo. Alentado por los rápidos avances de la investigación científica, Marruecos está convencido de que garantizar el acceso universal a la futura vacuna a precios asequibles es crucial para la salud mundial. Se trata de una causa que el Movimiento de los No Alineados debe defender.
En segundo lugar, la mitigación del impacto socioeconómico de la pandemia es tan importante como el aplanamiento de la curva de la pandemia. El Covid-19 ha obligado al mundo a encerrarse, paralizando sectores económicos enteros y sumiendo a millones de personas en el desempleo. Esto significa que debemos redoblar nuestros esfuerzos para preservar los progresos realizados hasta ahora en la lucha contra la precariedad y la pobreza.
El tercer punto, según el ministro marroquí, consiste en que en ningún lugar estos desafíos se imponen con tanta fuerza como en África, donde el 85,5% de los empleados trabajan en el sector informal. La Unión Africana ha pedido a los donantes bilaterales y multilaterales que aceleren su apoyo financiero y técnico y aligeren la deuda de los africanos. Marruecos considera que este llamamiento debe ser tomado en consideración en el seno del Movimiento de los Países No Alineados.
Refiriéndose a la experiencia del Reino, Bourita indicó que la respuesta de Marruecos se basa en cinco principios, definidos por Su Majestad el Rey: solidaridad, anticipación, prevención, enfoque holístico y prioridad a los ciudadanos, especialmente los más vulnerables.
También sostuvo que a nivel nacional, bajo la dirección de Su Majestad el Rey, Marruecos ha trabajado para mejorar su sistema de salud y mitigar el impacto socioeconómico de la crisis, presentando a la Cumbre la estrategia de Marruecos para luchar contra Covid, a sabiendas de que el Reino fue uno de los primeros países en cerrar su espacio aéreo.
Bourita precisó que inmediatamente tras la detección de los primeros casos, Marruecos declaró el estado de emergencia sanitaria.
En el mismo orden de ideas, recordó que Marruecos ha canalizado los recursos internos disponibles al Fondo Especial Covid-19, creado por iniciativa de Su Majestad el Rey. Hasta ahora, el gran auge de la solidaridad nacional ha dotado al Fondo de más de 3.500 millones de dólares, subrayó, añadiendo que a través de este fondo, 5,1 millones de hogares -muchos de los cuales trabajan en el sector no estructurado- han podido beneficiarse de subvenciones financieras directas.
Bourita recordó que Marruecos también ha movilizado a la industria nacional para producir equipo de protección personal.
En cuanto a la respuesta a nivel del continente africano, Bourita precisó que, en consonancia con el espíritu de solidaridad y el afrooptimismo, Su Majestad el Rey Mohammed VI lanzó una iniciativa para crear un marco operacional para colaborar con los países africanos en la lucha contra la pandemia. Se trata de una iniciativa pragmática y orientada a la acción, destinada a compartir experiencias y prácticas óptimas para hacer frente a las repercusiones sanitarias, económicas y sociales de la pandemia.