Según el ministro de Economía, Finanzas y Reforma Administrativa, Mohamed Benchaaboun, el proyecto de ley No. 26.20 por el que se aprueba el decreto ley No. 2.20.320 del 13 Shaaban 1441 (7 de abril de 2020), relativo a la superación del límite máximo de los préstamos externos, tiene por objeto completar el procedimiento previsto en el artículo 81 de la Constitución, presentando el mencionado decreto ley al Parlamento para su aprobación durante la próxima sesión.
Al presentar el proyecto de ley, Benchaaboun indicó que el procedimiento para superar el límite máximo de financiación externa se inscribe en el marco de las medidas urgentes adoptadas para combatir los efectos negativos del coronavirus (Covid-19) en todos los sectores vitales de la economía nacional, y señaló que la situación de las reservas de divisas podría experimentar un descenso importante, dado que se han visto afectados varios sectores, entre ellos el turismo, la inversión extranjera directa, los sectores de exportación y las remesas de los marroquíes que residentes el extranjero, además de las nuevas empresas mundiales de Marruecos.
Así pues, esta medida reforzará las reservas de divisas para que el país pueda cumplir sus compromisos con el exterior y mantener la capacidad de la economía nacional para satisfacer sus necesidades en cuanto a equipos médicos, medicamentos y productos básicos, alimentos y energía importados del exterior, afirmó el ministro.
"A pesar de la actual coyuntura, el Reino mantiene la confianza de las instituciones financieras internacionales, lo que le permite recibir inversiones extranjeras en condiciones adecuadas", dijo.
Además, el proyecto de ley No. 27. 20 La promulgación de medidas especiales relativas al funcionamiento de los órganos de administración de las sociedades anónimas y las modalidades de celebración de sus asambleas generales durante el período de estado de emergencia sanitaria se produce tras la adopción de medidas que limitan y prohíben las reuniones, en el marco del estado de emergencia sanitaria que coincide con el período de cierre de las cuentas anuales, ya que las empresas tienen dificultades para organizar reuniones de deliberación de sus asambleas para cerrar las cuentas del ejercicio fiscal 2019, de conformidad con la Ley 17-95 relativa a las sociedades anónimas.