"Aunque todavía estamos lejos del final de la crisis, ya sabemos que la globalización no saldrá indemne: no saldrá indemne de la revisión radical del funcionamiento de la economía, del cuestionamiento de las políticas públicas, de los sistemas políticos y sociales e incluso de las relaciones entre los Estados que ya están tomando forma", subraya Oualalou en un artículo publicado por el grupo de reflexión marroquí PCNS titulado "Una representación de la globalización: vulnerabilidad y confusión".

Según él, la crisis económica y financiera de 2008 ya había sacudido la globalización y su dinámica, provocando el comienzo de un reajuste del equilibrio de poder en el mundo.

En términos económicos, prosiguió Oualalou, la crisis de 2020 es fundamentalmente diferente de la que la precedió en el sentido de que se declaró "en la economía real", mientras que la crisis de 2008 -como la de 1929- fueron primero "crisis financieras antes de llegar a la esfera de la producción y, por último, a la esfera social".

Asimismo, asegura que, debido al origen "sanitario" de esta crisis, esta vez se dará prioridad a la salud: salvar vidas humanas y, para ello, detener la propagación del virus, tratar de reconocer su naturaleza y promover la investigación científica para establecer la terapéutica necesaria, etc.

Además, Oualalou sugirió que los Estados deberían abordar con diligencia la otra gran tarea de evitar el colapso de la economía antes de poner en marcha los instrumentos para reactivar los sistemas productivos, señalando que las crisis de 2008 y 2020 se habían desplazado rápidamente en Europa, revelando la fragilidad del "Viejo Continente", punto de partida de la globalización en el siglo XV.

El autor del libro "La mondialisation et nous" estima a priori que la salida de la crisis de 2020 se hará desde China, ya que después de 2008, el inicio de la salida de la crisis comenzó en los Estados Unidos, su punto de partida, señalando que el cataclismo causado por el Covid-19 da una "imagen exacta de lo que es la globalización en el siglo XXI, de la intensidad de las interdependencias de los tejidos productivos y ... de sus derivaciones".

Oualalou también señaló que esta crisis afectaba a la dimensión humana de la globalización, ya que había provocado el cierre de las fronteras nacionales, incluso dentro de las comunidades regionales (UE), y el cese repentino de las actividades turísticas, deteniendo el transporte aéreo y todos los servicios conexos.

Sin embargo, con una nota optimista, el ex ministro de Economía y Finanzas explica que la crisis del Coronavirus ha revelado la dimensión mundial de la investigación médica y científica en la carrera por encontrar la vacuna y/o la cura para el Covid-19, y la excelente interconexión entre los laboratorios e institutos de investigación de todo el mundo.

En cuanto a las lecciones que hay que aprender de esta pandemia, el investigador escribe que el reconocimiento de nuestra vulnerabilidad común está cambiando profundamente nuestra percepción de los sistemas operativos vigentes hasta ahora, creyendo que el reconocimiento de los límites de los modos de desarrollo predominantes "ya está innovando para crear nuevos paradigmas".