En un discurso pronunciado, domingo ante la primera Cumbre de los Jefes de Estado y de Gobierno de la Comisión Clima y del Fondo Azul de la Cuenca del Congo, que se celebra en Brazzaville, el Soberano afirmó que este gran proyecto generará "inevitablemente" una dinámica positiva portadora de proyectos capaces de sostener las economías de los Estados miembros. Permitirá también la mejora de las vías de navegación interior, el acondicionamiento de los puertos secundarios, el desarrollo de la pesca sostenible, la lucha contra la contaminación de los cursos de agua y el refuerzo de la irrigación, dentro de la perspectiva de mejora de la productividad agrícola, destacó SM el Rey antes de señalar que “esta nueva economía, la economía del agua y en torno al agua, será el motor del desarrollo”.
Sin embargo, el Soberano sostuvo que el establecimiento de este Fondo “ha de ir emparejado con la movilización de todos los actores económicos y de la sociedad civil, a fin de emprender acciones concretas para la atenuación y adaptación, garantizando la emergencia de un modo resiliente de desarrollo”.
En su discurso, Su Majestad el Rey destacó, además, que la financiación de este proyecto, que abre unas bellas perspectivas para la Cuenca del Congo, así como para la región y para todo el continente africano, supone un reto importante a la hora de su puesta en marcha
“Por consiguiente, hemos de innovar y poder crear mecanismos capaces de identificar y movilizar los recursos financieros. También tenemos que convencer a los suministradores de fondos bilaterales y multilaterales, tanto públicos como privados”, insistió el Soberano.
SM el Rey recordó, también, las etapas salvadas desde la Cumbre Africana de la Acción. “En Oyo, en el mes de marzo de 2017, fue lanzado el Fondo Azul; en noviembre de 2017, su operatividad fue concebida en Brazzaville, y en el mes de marzo de 2018, se aceleró su establecimiento en Rabat, con ocasión de un encuentro sobre los términos de referencia del estudio de la prefiguración del Fondo Azul”, indicó el Soberano.
“A lo largo de este proceso, el Reino de Marruecos se movilizó, con el fin de garantizar el éxito de este ambicioso proyecto, desplegando el saber hacer que tiene acumulado en materia de lucha contra el cambio climático”, subrayó SM el Rey antes de afirmar haber optado por apoyar este programa al fundarse sobre un nuevo paradigma que responde a las necesidades presentes y futuras. Efectivamente, el mismo se basa en programas integrados, inclusivos y solidarios de la nueva economía azul y verde.
“Hemos sido secundados en nuestro apoyo por la dimensión humana colocada en el centro del proyecto. En efecto, la adopción de un enfoque inclusivo y participativo hacia los habitantes de la región viene a ser fundamental”, subraya el Soberano.
Animados por un espíritu de fraternidad y solidaridad africana, “nos hallamos aquí para contribuir a la creación de una dinámica virtuosa. El verdadero reto consiste en la salvaguarda y valorización de un valioso patrimonio africano, a saber, el Río Congo", afirmó SM el Rey. “He aquí un deber que debemos cumplir con los 200 millones de africanas y africanos que viven en esta Cuenca, así como con todo nuestro continente”.