“La regionalización avanzada constituye un logro institucional capital que participa de esta inquebrantable voluntad que Nos ha animado desde Nuestra accesión al Trono de Nuestros gloriosos antepasados, para atravesar un significativo umbral en la reforma y modernización de nuestras instituciones. Por ello, le debemos brindar el máximo cuidado”, dijo el Soberano en este mensaje cuya lectura fue dada por el consejero de SM el Rey Abdellatif Mennouni.
Esta obra colosal exige la implicación de una panoplia de actores y el compromiso de las fuerzas vivas y del cuerpo social en su integridad, precisó SM el Rey.
Para las diversas etapas de la construcción de este edificio, será necesario, pues, un elevadísimo sentido de responsabilidad y un enorme trabajo de movilización y convicción. También será necesaria una gran perseverancia y un importante sentido de diálogo y de comunicación a fin de que el enorme potencial que ofrece el marco institucional y legal sea plenamente explotado y produzca todos sus benéficos resultados, prosiguió el Soberano.
En función de esta nueva pedagogía de responsabilidad y de compartir, y a la luz de estas relaciones que son de un nuevo tipo, los electos territoriales podrán aportar la dinámica del cambio, relevar los retos, traducir las aspiraciones de sus electores y aportar las buenas respuestas a las expectativas de los ciudadanos, agregó Su Majestad el Rey.
El Soberano llamó igualmente a los servicios del Estado en las administraciones públicas a establecer renovadas relaciones de cooperación, diálogo, concertación, convergencia y partenariado con las entidades territoriales.
“Efectivamente, a este precio vamos a poder realizar la complementariedad, la coherencia de las acciones y las sinergias necesarias al despliegue de la obra de la regionalización avanzada que deseamos”, dijo SM el Rey.
El Soberano recomendó a los participantes en este Foro que sus debates otorgaran la importancia que se merecen algunos aspectos determinantes que deben ser igualmente tomados en consideración por el gobierno.
Los programas regionales de desarrollo, dijo SM el Rey, deben inscribirse dentro del modelo de desarrollo en curso de construcción, antes de subrayar que las entidades territoriales, y particularmente las regiones que deben asumir plenamente la preeminencia que les otorga la Constitución, tendrán que aportar su propia contribución a fin de corregir las deficiencias del modelo actual, reducir las disparidades y desigualdades territoriales, así como avanzar con pasos acelerados y firmes por la vía de la justicia social.
“Cada espacio territorial debería disponer de su propia visión que armoniosamente ocuparía su lugar en el seno del modelo nacional de desarrollo”, indicó el Soberano para invitar a los electos territoriales a involucrarse fuertemente en la problemática de la juventud marroquí.
“En este sentido, únicamente las soluciones locales adaptas a los problemas de los jóvenes son capaces de dar sentido y consistencia a las políticas transversales que el Estado central debe desplegar en beneficio de los mismos”, dijo SM el Rey antes de agregar que se trata, igualmente, del alcance de las competencias atribuidas a las entidades territoriales y particularmente a los consejos regionales.
En cuanto a la gobernanza, SM el Rey llamó a los participantes en este Foro a que sus concertaciones y reflexiones materializaran de manera más precisa, más práctica y más mensurable, un concepto fuerte cuya alteración hay que evitar a todo precio.
“He aquí un trabajo de pedagogía y comunicación que ha de ser orientado hacia los electores y la opinión pública para que se pueda apreciar de manera apropiada el contenido y el alcance de la gobernanza, así como la importancia de los esfuerzos por realizar”, subrayó el Soberano.
La realización de una obra como la regionalización avanzada requiere un largo plazo, exigiéndose determinación para combatir la inercia, vigilancia para hacer frente a los conservadurismos y reactividad para adaptarse, corregir y ajustar, concluyó SM el Rey.