Este documento ha sido presentado delante de SAR la Princesa Lalla Salma, presidenta de la Asociación Lalla Salma de Lucha Contra el Cáncer (ALSC), en la ceremonia de clausura de esta manifestación en la que participaron particularmente, las princesas y las primeras damas invitadas a esta conferencia así como otras personalidades.
A través de esta hoja de ruta, los participantes recomiendan el fortalecimiento de la cooperación Sur-Sur entre los países de la región para la creación de un Fondo Regional para la prevención y el tratamiento del cáncer, la creación de una escuela africana de oncología para el desarrollo de las competencias humanas, y la fundación de un comité interregional para el apoyo y el seguimiento de los programas de prevención y de lucha contra el cáncer en la región.
También se pronunciaron a favor de la revisión de las políticas sanitarias, la necesidad de la elaboración de un plan nacional de prevención y de control del cáncer, la creación de un registro de población para la recopilación de los datos relativos al cáncer, y el seguimiento de la situación de morbilidad, de mortalidad y del impacto de las acciones emprendidas respecto a esta patología.
Los conferenciantes dijeron estar a favor también a la planificación de programas de detección precoz del cáncer del cuello de útero a través de la utilización de los métodos apropiados en este dominio en el marco de un sistema de cuidado global.
Los participantes llamaron, igualmente, a la introducción de la vacuna Anti-HPV según las condiciones de cada país a un coste que puede asegurar un acceso democrático a la atención médica.
El lanzamiento del "Llamamiento de Marrakech" emana de esta toma de consideración de la importancia de la incidencia elevada del cáncer del cuello de útero en los países de la región, la preocupante tasa de defunciones de las mujeres en edad de procreación, y de la evolución de la demografía en los países de estas regiones, y de la circulación del virus HPV, que causa este cáncer, que amenazan con ser una "tragedia humana" si ninguna acción organizada de prevención y de asunción es emprendida.
Resulta también del reconocimiento por las Naciones Unidas, en la reunión del pasado 20 de septiembre, del sitio que debe ser concedido a las enfermedades no transmisibles en los sistemas sanitarios y la prioridad que debe ser otorgada a la lucha contra el cáncer, y los resultados notables obtenidos por los programas de lucha contra el cáncer en algunos países de la región, desde el Llamamiento de Rabat en 2006, que abren una nueva era en esta lucha.