La nueva mezquita ha sido edificada, en Hay Ryad, sobre una superficie de 1.400 m2 por un coste estimado en 10,7 millones de dirhams, financiados por el ministerio de Habices y Asuntos islámicos. Este edificio religioso, que puede acoger hasta 1000 fieles, está compuesto por dos salas de oración (hombres y mujeres), una vivienda para el imán y otra para el almuédano y cinco locales comerciales.
La construcción de esta mezquita, según las normas de la arquitectura marroquí auténtica, emana de la atención particular acordada por SM el Rey, Amir Al Muminin (Emir de los creyentes) a los asuntos religiosos y de la preocupación constante de dotar las mezquitas, combinando funcionalidad y estética para que la comunidad de creyentes pueda ejercer su culto en buenas condiciones.
La realización de este edificio se enmarca igualmente en la política del Estado relativa a la construcción de mezquitas en el marco de un importante programa adaptado a las necesidades de los fieles, velando por garantizar una repartición harmoniosa de los lugares de culto a través de las diferentes regiones del Reino.