Moussa perdió el jueves en la final contra el equipo malasio, y se embolsó un premio de 15.000 dólares.
El jugador marroquí se convierte así en el primer jugador árabe y africano que alcanza esta ronda, tras su victoria sobre el representante del equipo tailandés en la semifinal.
Moussa se clasificó tras su victoria en el e-Mountakhab organizado por la Federación Real Marroquí de Juegos Electrónicos, en colaboración con la FIFA y con la participación de los 100 mejores jugadores marroquíes de todo el mundo.