“Fuerte del liderazgo de SM el Rey Mohammed VI, Marruecos nunca ha sido tan legítimo y tan escuchado por la Comunidad de Naciones como hoy”, declaró Azoulay en la sesión plenaria del 10º Foro Mundial de la Alianza de Civilizaciones, que se inauguró en presencia del Presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, del secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, del Rey de España, Felipe VI, y del Alto Representante de la UNAOC, Miguel Ángel Moratinos.
En su intervención sobre el tema “Unidos en la paz para otro futuro”, el consejero de SM el Rey señaló que “en un tiempo y un espacio donde florecen las ilusiones mortíferas de la exclusión y de la negación del otro, Marruecos encarna lo que la Alianza de Civilizaciones quiere decir al mundo, la escucha de todas las narrativas y el respeto de la identidad, la historia y la espiritualidad de cada uno”.
“¿Qué otro país puede reunir hoy a miles de musulmanes, judíos y cristianos que se encuentran en tierra del Islam, como hace Marruecos, por la alegría de estar juntos y para expresar su compromiso con la universalidad de la paz y la primacía de la vida?”, aseguró.
“Esta es una realidad que Marruecos encarna, permaneciendo fiel a todos los paradigmas y criterios que son lo de una cultura de paz alimentada por la misma justicia y la misma dignidad para todos”, añadió Azoulay, que fue miembro del Grupo de Alto Nivel creado hace más de veinte años por las Naciones Unidas para crear la Alianza de Civilizaciones.
“Fue en un momento en que las teorías perversas del choque de nuestras religiones, nuestras historias y nuestras civilizaciones se esbozaban por la fuerza en el breviario de la comunidad de naciones", recordó.
Si hace veinte años la situación del mundo era preocupante, hoy es aún más grave. “Todos hemos dado un paso atrás, el mundo ha dado un paso atrás”, lamentó Azoulay, subrayando que “el mundo actual se adapata con demasiada facilidad a una situación hecha de arcaísmos y regresiones que creíamos erróneamente definitivamente superada”.
“Ha llegado el momento de tomar la justa medida de la situación actual, que exige más que nunca que el sistema de las Naciones Unidas siga siendo el espacio en el que el mundo debe entrar en razón y devolver sus oportunidades a la universalidad de la paz, que es el logro más frágil, más central y más moderno de nuestras civilizaciones”, abogó.
En esta perspectiva, recordó que la resolución votada por la Asamblea General de la ONU para crear la Alianza de Civilizaciones fijaba “de forma clara y precisa la hoja de ruta de nuestras sociedades para dar oportunidades a una paz justa y definitiva entre palestinos e israelíes”, subrayando “la coherencia y constancia de la política aplicada por Marruecos, que siempre ha hecho de una solución de dos Estados con igualdad de derechos, dignidad, justicia y libertad su credo, para dar oportunidades a la paz”.