Este evento, que estará copresidido por el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, y el director general de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), Fernando Arias, reunirá a más de 140 participantes extranjeros, entre ellos representantes de más de 40 Estados Parte en la Convención sobre Armas Químicas, así como expertos internacionales de los ámbitos de la ciencia, la industria, la sociedad civil y el mundo académico.
La Conferencia proporcionará una plataforma para debatir los retos y oportunidades que presenta la IA en el contexto del desarme y la seguridad químicos.
Esta conferencia ilustra el compromiso del Reino de Marruecos de promover la paz y la seguridad internacionales mediante el uso responsable de tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial, en ámbitos cruciales como la seguridad química y la no proliferación.
A lo largo de tres días, los participantes tendrán la oportunidad de explorar diversos temas, como las aplicaciones de la IA en la química, los retos asociados a la gobernanza ética de la IA y su papel en la lucha contra el terrorismo químico.
Marruecos se ha consolidado como un actor importante en la gobernanza de la IA a nivel internacional. Primer país africano y árabe en aplicar la Recomendación de la UNESCO sobre la ética de la IA, el Reino también copatrocinó las primeras resoluciones de la ONU sobre IA y lanzó, en asociación con Estados Unidos, el «Grupo de Amigos de la Inteligencia Artificial para el Desarrollo Sostenible». Este grupo pretende movilizar esfuerzos para acelerar la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en los que la IA, combinada con la química, podría desempeñar un papel clave.
Creada en 1997 para aplicar la Convención sobre Armas Químicas, la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas trabaja por un mundo libre de armas químicas. Con 193 Estados miembros, la OPAQ recibió el Premio Nobel de la Paz en 2013 por sus extraordinarios esfuerzos de desarme. En la actualidad, la OPAQ sigue desempeñando un papel fundamental en la prevención del resurgimiento de las armas químicas y la promoción del uso pacífico de la química.