“Esta iniciativa, loable en más de un sentido y conforme a los principios del derecho internacional, la Carta de Naciones Unidas y todas las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU, ofrece una base sólida y constructiva para una solución política pacífica” a este conflicto artificial, subrayó Youssouf Aden Moussa, consejero en la Misión Permanente de Yibuti ante la ONU.
Aden Moussa, quien se expresaba el martes ante la 4ª Comisión de la Asamblea General de la ONU, señaló que la iniciativa de autonomía representa una “importante propuesta que atestigua la voluntad de Marruecos de encontrar una solución duradera y pacífica a este conflicto, tomando la vía del diálogo y la negociación de acuerdo con los principios del derecho internacional”.
“Esboza los contornos de una solución consensuada y mutuamente aceptable para todos los actores” y pretende contribuir a la paz y la estabilidad, dijo, instando a todas las partes a aprovechar esta oportunidad para “construir un futuro duradero y pacífico y no dejar a nadie atrás”.
También expresó el apoyo de su país a los esfuerzos que se están realizando en el marco del proceso político que se lleva a cabo bajo los auspicios del secretario general de Naciones Unidas con vistas a alcanzar una solución política, realista, pragmática, duradera y de avenencia para este diferendo regional, tal y como recomiendan las resoluciones del Consejo de Seguridad.
Concluyó que sólo la solución política a este conflicto artificial y el refuerzo de la cooperación en la región del Magreb “contribuirán significativamente a reforzar la estabilidad y la seguridad” en todo el Sahel.