«Costa de Marfil desea reafirmar su pleno apoyo a la iniciativa de una amplia autonomía presentada por Marruecos», subrayó el representante de Costa de Marfil ante la 4ª Comisión de la Asamblea General de la ONU, señalando que esta propuesta marroquí se ajusta a la Carta de Naciones Unidas y a las resoluciones del Consejo de Seguridad, así como a la legalidad internacional.
En este sentido, se felicitó por «esta credibilidad demostrada, en particular por el fuerte apoyo internacional al plan de autonomía».
«Este enfoque positivo otorga a los habitantes del Sáhara marroquí importantes prerrogativas políticas, económicas y sociales», dijo, recordando que los habitantes del Sáhara marroquí eligen libre y democráticamente a sus representantes. Algunos de estos representantes locales electos participaron en las mesas redondas de Ginebra, así como en los trabajos del C24, recordó el diplomático.
El diplomático marfileño también se felicitó por el firme compromiso de Marruecos con el proceso político llevado a cabo bajo los auspicios exclusivos del Secretario General de la ONU, añadiendo que su país está a favor de relanzar este proceso de la ONU y «por lo tanto alienta a de Mistura en sus esfuerzos para reanudar las mesas redondas» ya organizadas en Ginebra en diciembre de 2018 y marzo de 2019.
«La esperanza suscitada por estos importantes encuentros, en los que participaron todas las partes concernidas, merece ser consolidada», sostuvo, expresando el apoyo de su país a las resoluciones del Consejo de Seguridad que llaman a la organización de otras mesas redondas con el mismo formato y los mismos participantes, es decir, Marruecos, Argelia, Mauritania y el “polisario”.
Al mismo tiempo, el representante de Costa de Marfil se congratuló por la dinámica de desarrollo socioeconómico de las provincias del sur, subrayando que el nuevo modelo de desarrollo lanzado en 2015 consolida la pertinencia de la iniciativa de autonomía marroquí.
En el plano social, el diplomático precisó que su país se congratula de las acciones sustanciales emprendidas por Marruecos para promover los derechos humanos en la región del Sáhara marroquí y celebra en este sentido el papel de las comisiones regionales del Consejo Nacional de Derechos Humanos en Dajla y Laayún, así como la plena cooperación de Marruecos con la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos y los procedimientos especiales del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
En cuanto a las violaciones de los derechos humanos cometidas en los campamentos de Tinduf, el diplomático marfileño afirmó que estos abusos «son fuente de preocupación» para su país, que llama al censo de los secuestrados en estos campamentos, tal y como recomienda el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados y las disposiciones pertinentes del derecho internacional humanitario y las resoluciones del Consejo de Seguridad, incluida la resolución 2703.
Por último, acogió con satisfacción el compromiso de Marruecos con los acuerdos militares existentes.