La Gran Medalla de Oro de este año se concede a Salima Naji, cuya “magnífica obra ilustra con talento y responsabilidad esta capacidad de inserción de la arquitectura en el respeto del lugar”, anunció la presidenta de la Academia, Catherine Jacquot, en la ceremonia de entrega de los Prix et Récompenses 2024.
Ante una prestigiosa asistencia compuesta de personalidades de diferentes horizontes en frealción con el mundo de la arquitectura, Jacquot elogió la labor de este especialista y promotora de creaciones en tierra y otros materiales tradicionales marroquíes, que reflejan la riqueza de un patrimonio con los recursos en materiales y saber hacer.
Por su parte, la presidenta del jurado de los premios y galardones, Sophie Berthelier, señaló que este año la máxima distinción de la Academia de Arquitectura recompnesa este año a “una arquitecta antropológa que, en su relato combativo, mezcla la historia, el pasado y el futuro”.
Al presentar su obra, el arquitecto Martin Robain, miembro del jurado, subrayó que la arquitecta marroquí inscribe su labor en “una dimensión humana, participativa y de aprendizaje constante en el taller”.
La arquitecta marroquí aprovechó esta ocasión para agradecer a la Academia de Architectura y a los miembros del jurado por este premio, que ilustra la confianza de sus colegas en la calidad de su obra, que ella presetna como “arquitectura intemporal”.
“El premio representa la seguridad y la confianza de un grupo de profesionales que se preocupan por la arquitectura y por el mundo. Es una consagración para mí como arquitecta marroquí y africana”, se felicitó Salima Naji en una declaración a la MAP.
Afincada en Tiznit desde 2008, Salima Naji estudió arquitectura en París. Allí también obtuvo su doctorado en antropología social, antes de seguir una formación de posgrado en estética, artes y tecnologías de la imagen, y posteriormente en filosofía del arte.
Publicó varios libros, el más reciente « Architecture du bien commun, pour une éthique de la conservation ».