Este alegato, que forma parte de la interacción con los mecanismos de derechos humanos de la ONU, centra las intervenciones de los actores asociativos marroquíes, ya sea durante los debates interactivos sobre el informe anual del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, o durante su participación en los actos paralelos al programa de esta sesión, que se celebra bajo la presidencia de Marruecos.

En su intervención durante el debate del punto dedicado a la actividad de los mercenarios, el presidente de la Liga del Sahara para la Democracia y los Derechos Humanos, Hamada El Bihi, hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que muestre más vigilancia con el fin de contrarrestar “las maniobras de los mercenarios del Polisario destinadas a atentar contra la estabilidad regional, así como contra la integridad territorial de los Estdaos”.

En un contexto marcado por la proliferación de conflictos armados, “terreno fértil para las actividades de los mercenarios, verdadero peligro para la seguridad de los civiles, que ven amenazados sus derechos más elementales”, advirtió de que este fenómeno afecta especialmente a las poblaciones secuestradas en los campamentos de Tinduf, donde están a merced de los milicianos del Polisario, apoyados por el régimen argelino.

 “A través del CDH, es esencial llamar la atención de los Estados sobre las amenazas realtivas a estas actividades, que se alimentan de los problemas de pobreza y desempleo”, sostuvo.

En este mismo contexto, la sesión del CDH estuvo marcada por un llamamiento a la acción lanzado por oenegés para que Argelia cumpla sus compromisos internacionales como país de acogida en la protección de las poblaciones retenidas en los campamentos de Tinduf.

Los actores asociativos exigen concretamente el fin de los abusos cometidos por el Polisario, con la complicidad de Argelia, y la apertura de investigaciones judiciales a este respecto, afirmando que los separatistas recurren a las desapariciones y otros abusos para silenciar e intimidar a la población.

El informe anual sobre la situación de los derechos humanos en el mundo es objeto de un debate general durante la 57ª sesión ordinaria del CDH, que se celebra hasta el 11 de octubre bajo la presidencia del embajador Omar Zniber, representante permanente de Marruecos ante la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra y actual presidente del Consejo de Derechos Humanos para el año 2024.