«La presidencia de Marruecos tiene una preocupación fundamental, que es dejar su huella en la racionalización y la eficacia de los trabajos del CDH», subrayó Zniber en una entrevista a la MAP, con motivo de la sesión de septiembre del Consejo de Derechos Humanos, que se inauguró el lunes en el Palacio de las Naciones.
Siete cofacilitaciones están ya en curso bajo la presidencia marroquí, precisó el embajador, que dijo ser consciente del carácter «extremadamente delicado» de su misión al frente del CDH, en particular de su «responsabilidad de velar por que el debate se organice en el marco de un diálogo sereno, marcado por el respeto mutuo y la observancia de las reglas de procedimiento».
Además de las cuestiones relativas a la eficacia y la racionalización, la Presidencia marroquí estará marcada por otras cofacilitaciones, en particular sobre la reforma del Consejo, destinada a “revisar los estatutos de este órgano y hacer propuestas a la Asamblea General de las Naciones Unidas”.
El presidente del CDH cita en particular una cofacilitación sobre las nuevas tecnologías, que se centrará en las formas de utilizar la tecnología digital en los trabajos del Consejo, y otra “no menos importante” sobre la paridad de género.
“En este punto, podemos felicitarnos de haber conseguido algo: la creación de un órgano consultivo, por primera vez bajo Presidencia marroquí, que estará compuesto por personalidades de todo el mundo, y cuya lista ya está lista”, indicó Zniber.
Este proyecto será lanzado oficialmente el 30 de septiembre por la Presidencia marroquí, añadió, señalando que la tarea de este órgano consistirá en hacer trabajar a todo el ecosistema de la ONU, en Ginebra, Nueva York y otros lugares, para que la paridad entre hombres y mujeres sea “escrupulosamente respetada en la toma de decisiones, en la jerarquía y en el reparto de las consecuencias”.