En este mensaje, el Soberano expresa sus calurosas felicitaciones y sus mejores deseos a Sus Altezas Reales con motivo del nacimiento de su primera niña, Su Alteza la Princesa Iman bint Al Hussein, rogando al Altísimo que les conceda, en ella, la alegría de los ojos, le otorgue salud y bienestar, la rodee de su inmensa solicitud e ilumine su vida con alegría y felicidad.
Su Majestad el Rey dice compartir con la familia real la alegría de este feliz acontecimiento, implorando a Dios que perpetúe sobre ellos las bendiciones de la felicidad y de la quietud.