"Gracias a una diplomacia activa, apoyada por un liderazgo real ilustrado, Marruecos se posiciona como una gran potencia africana", declaró a la MAP este ex diputado europeo y profesor emérito de Derecho en la Universidad de París-II, con motivo de la celebración por el pueblo marroquí del 25º aniversario de la entronización de Su Majestad el Rey.
La estatura de la que goza el Reino es el fruto de varios años de reformas institucionales, políticas y económicas que han consolidado las bases de un Marruecos moderno, próspero, estable y abierto al mundo", explicó.
Destacando el auge económico y los progresos sociales logrados bajo el liderazgo del Soberano, hizo un llamamiento a "una reflexión sobre el Mediterráneo en la que Marruecos, único país estable del sur de la región, desempeñará un papel clave para hacer frente a los distintos retos que se nos plantean".
"Por parte europea, debemos poner en marcha una política orientada hacia los países de la orilla sur del Mediterráneo. El Mediterráneo debe ser el centro de nuestro trabajo, con Marruecos en el centro de una verdadera política de co-construcción de nuestro futuro común", insistió.
El Mediterráneo y Europa tienen la suerte de contar con Marruecos como interlocutor, donde Su Majestad el Rey es el garante de la estabilidad, con una visión de futuro, un rumbo bien definido y un horizonte bien delimitado", explicó el jurista francés.