"Reserva inagotable de nuevas ideas para reinventar nuestras sociedades, el planeta-cultura marroquí se ve hoy impulsado por una dinámica muy prometedora para el futuro de nuestro panorama cultural y artístico", subrayó Azoulay, que había elegido tratar el tema de las "Artes y de la cultura invitadas al banquete del pensamiento y la modernidad" para su discurso inaugural del año universitario del ISADAC.
"Nuestro patrimonio cultural, en toda su singularidad y la singularidad de su ADN, alimentado por la profundidad de todas nuestras diversidades, nos ha permitido, bajo el liderazgo de Su Majestad el Rey Mohammed VI, dar las mejores oportunidades posibles a comunidades ágiles, innovadoras e inclusivas", recordó Azoulay, destacando la "contribución histórica y decisiva de este patrimonio en movimiento" a la influencia de Marruecos en el seno de la Comunidad de las Naciones.
En una amplia retrospectiva de las decisiones pioneras tomadas por Esauira en los últimos 30 años "para situar el patrimonio, la historia y la cultura en el centro de su renacimiento y refundación", el Consejero de SM el Rey concluyó subrayando con fuerza y convicción que "la cultura es un bien público mundial que nos conecta a unos con otros y que nos enriquece a todos cuando nos preocupamos de compartirla con el mayor número de personas posible, sin renunciar nunca a nada de su irrefragabilidad y de su legado histórico, espiritual, filosófico y moral".
Por su parte, la directora del ISADAC, Latifa Ahrar, destacó la importancia de este encuentro animado por Azoulay, eminente personalidad política, hombre comprometido en Marruecos y en el extranjero con la promoción del diálogo entre civilizaciones y religiones y con el renacimiento de Mogador, hombre de diálogo y buen oyente, y militante en la sociedad civil a favor de la interculturalidad.
El ISADAC ha aportado mucho a la escena cultural marroquí, contribuyendo a la formación de ejecutivos cualificados en los ámbitos de la interpretación, la escenografía y la animación cultural, agregó.