La reunión estuvo marcada por un examen e intercambio de puntos de vista sobre las recomendaciones del Consejo, y una presentación de la visión del ministerio para desarrollar un modelo en línea con las recomendaciones del Consejo y con el segundo compromiso de la hoja de ruta 2022-2026, que se centra en la mejora de la calidad del libro de referencia con vistas a lograr el impacto esperado en los alumnos, según un comunicado del ministerio.

Benmoussa recordó los esfuerzos realizados por el Ministerio para mejorar el aprendizaje de los alumnos a través de la aplicación de la hoja de ruta 2022-2026, que incluye entre sus compromisos la dotación de planes de estudio y libros de texto basados en la adquisición de competencias y aprendizajes fundamentales y el dominio de idiomas, señaló la misma fuente.

Las recomendaciones del Consejo de la Competencia se refieren a la necesidad de revisar a fondo el modelo económico en el que se basa el mercado de los manuales escolares, teniendo en cuenta las especificidades culturales y sociales del país, así como las funciones y tareas asignadas a los ministerios en relación con los manuales escolares, subraya la misma fuente.

Estas recomendaciones se refieren también a la aplicación de un nuevo marco jurídico y reglamentario. Asimismo, el Estado debe asumir la producción de manuales escolares oficiales, destinados especialmente a la enseñanza primaria y secundaria, como un acto constitutivo de la soberanía nacional.

El Ministerio presentó propuestas para aplicar las recomendaciones del Consejo de la Competencia a nivel legislativo y reglamentario, incorporando disposiciones relativas a los manuales escolares en el proyecto de ley de educación, señala el comunicado.