Expresándose en un debate de alto nivel sobre el desarrollo de la capacidad para el empoderamiento económico de África en un contexto de múltiples conmociones, Gopinath indicó que el programa de desarrollo de la capacidad, del FMI figura entre los principales programas de apoyo del Fondo, señalando que casi el 50% del presupuesto asignado a este mecanismo está dedicado a África.
También señaló que una de las principales funciones del FMI es proporcionar asistencia técnica y capacitación, y agregó que todos los países miembros podrán acceder a este programa, previa solicitud, en función de las necesidades de cada Estado.
Gopinath explicó que el desarrollo de la capacidad se centra en mejorar la recaudación de impuestos y la gestión de las finanzas públicas, y en apoyar la modernización de las políticas monetarias y de cambio.
A este respecto, destacó la fructífera colaboración en este ámbito con Bank Al-Maghrib, que permitió a Marruecos realizar grandes avances en términos de modernización de su política monetaria.
Por otra parte, resaltó que África no sólo necesita financiación internacional, sino también sus capacidades internas, habida cuenta de los enormes activos de que dispone el continente, dirigido por una juventud talentosa y ambiciosa.
Por su parte, el ministro de Finanzas de Sierra Leona, Sheku Ahmed Fantamadi Bangura, indicó que África se enfrenta a graves desafíos macroeconómicos, entre ellos el acceso inadecuado a la financiación, los altos costos de la deuda y la limitada recuperación fiscal, además de las dificultades relacionadas con el cambio climático.
A tal efecto, ha insistido en la importancia de reforzar los conocimientos especializados y las capacidades del continente, principalmente mediante la cooperación regional y las asociaciones internacionales, a fin de que los países africanos puedan resolver estos problemas complejos y alcanzar su pleno potencial.
Por su parte, la gobernadora del Banco Central de Seychelles, Caroline Abel, destacó que el programa de desarrollo de capacidades del FMI desempeña un papel activo en el empoderamiento de los responsables de la toma de decisiones en África, ayudando a los jóvenes del continente a convertirse en el motor de la economía mundial.
También precisó que este programa había ayudado a su país a formar líderes en diversos ámbitos, lo que permitiría hacer frente a las crisis, aumentar el papel de África en la economía mundial y combatir la fragmentación, llamando a todos los países africanos a beneficiarse de este programa.