"Ha sido un gran placer trabajar con las autoridades marroquíes, que han demostrado su compromiso y determinación", indicó Ogada al programa “IMF Today”, afirmando estar "gratamente sorprendido por la calidad de la infraestructura del evento, que destila la magia de la cultura y el arte marroquíes".
La organización de este acontecimiento, prosiguió, "no fue una tarea fácil debido a la pandemia". Tras el terremoto de Al Hauz, dijo Ogada, las autoridades quisieron seguir adelante con la organización de las Asambleas y mostrar la capacidad de recuperación de Marruecos y la confianza de las instituciones de Bretton Woods en el Reino.
También subrayó la importancia de organizar un acontecimiento de este tipo en África, un continente con un futuro brillante, y más concretamente en Marruecos, que es una encrucijada entre África, Europa y Oriente Medio.
"Es también una manera de demostrar que nos interesamos mucho por la región y sus prioridades, 50 años después de que se celebraran las últimas asambleas en suelo africano", insistió.
En una entrevista en el mismo programa, la Directora Gerente del FMI, Kristalina Georgieva, calificó de "extraordinaria" la organización de este gran acontecimiento, que "nos ha permitido admirar la hospitalidad y la calurosa acogida del pueblo marroquí", cuyo espíritu de solidaridad debe guiar los trabajos de estas Asambleas para hacer frente a los distintos retos que tenemos por delante".