A excepción de algunos daños menores en ciertos equipos de la central eléctrica "Noor Uarzazat", que ya han sido reparados, todas las instalaciones energéticas funcionan con normalidad, indicó el ministerio en un comunicado, precisando que las instalaciones nucleares no se vieron afectadas.
En cuanto a las actividades mineras en las provincias de Al Hauz y Taroudant, no se han producido cambios fundamentales tras el seísmo. Se han creado unidades técnicas en coordinación con las empresas mineras afectadas para evaluar y limitar los posibles daños y riesgos, vigilando las distintas explotaciones mineras subterráneas, así como sus instalaciones de superficie, precisó la misma fuente.
A este respecto, el ministerio ha subrayado el carácter rutinario de las actividades de exploración y extracción subterráneas, de acuerdo con las especificaciones de las empresas de exploración y explotación minera, que exigen el cumplimiento de evaluaciones medioambientales y normas estrictas de seguridad y medio ambiente.
El Ministerio también ha examinado la situación de las infraestructuras de almacenamiento y distribución de petróleo, en particular en las zonas afectadas por el seísmo, señalando que, con excepción de algunas estaciones de servicio que sufrieron daños menores, las demás instalaciones no sufrieron daño alguno. No hubo desabastecimiento de productos energéticos, en particular de gasóleo, gasolina, gas butano o combustible de aviación.
En este contexto, los servicios del Ministerio han seguido de cerca la llegada de camiones cisterna a las zonas afectadas para mantener las existencias y garantizar el abastecimiento de estas zonas en las mejores condiciones posibles y de forma continua.