Equipos que representan los distintos socios de la Fundación trabajan durante todo el día para recibir, clasificar y preparar las ayudas enviadas a las regiones afectadas, incluidas las aportadas por los ciudadanos y los agentes de la sociedad civil desde todas las regiones de Marruecos.
La creación de este nuevo depósito se enmarca en la asistencia y el apoyo que la Fundación Mohammed V para la Solidaridad presta a los habitantes de los pueblos afectados, en aplicación de las Altas Instrucciones de SM el Rey Mohammed VI.
Inmediatamente después del seísmo, la Fundación movilizó a sus diferentes componentes para garantizar que las ayudas, en particular en especie, sean entregadas y distribuidas en las condiciones adecuadas, con rapidez y eficacia.
"La ayuda se transporta de los almacenes centrales a los almacenes locales", explicó Souad Boulouiz, responsable de proyectos en la Fundación Mohammed V para la Solidaridad, precisando que se han habilitado dos depósitos en la región Marrakech-Safi, en Tahanaut y Chichaua, desde donde la ayuda se transporta directamente a los aduares afectados.
La ayuda se distribuye por vía terrestre a los aduares que son accesibles, o gracias a la intervención eficaz y urgente de las Fuerzas Armadas Reales (FAR) y de la Gendarmería Real por medio de helicópteros, que hacen llegar la ayuda a la población durante todo el día, prosiguió, en declaraciones a la MAP.
Saludando la gran ola de solidaridad de los diferentes componentes de la sociedad marroquí hacia las víctimas del seísmo, Boulouiz subrayó que la Fundación trabaja sin descanso, en estrecha coordinación y asociación con los servicios del Ministerio del Interior, las FAR, la Gendarmería Real, la Protección Civil y las autoridades locales, para atender las necesidades de las poblaciones afectadas.